Marvel: una transformación …¿destructiva?
Por Miguel Ángel García
El arte gráfico es una manera muy sutil de introducir a alguien a la lectura, así como una herramienta de proporciones ficticias que nos permite no morir de realidad, sumergiéndonos en increíbles mundos y aventuras, generalmente protagonizadas por superhéroes.
Marvel junto a DC Comics, ha sido una de las dos principales editoriales de historietas desde la segunda mitad del siglo pasado hasta la fecha, introduciendo a la cultura popular norteamericana (e incluso mundial) personajes icónicos como Spider-Man, Thor, Capitán América, Hulk, los X-Men, los Cuatro Fantásticos, entre otros, quienes no sólo han librado batallas dentro de los impresos, sino que han dado el salto a la pantalla grande, de tal manera que actualmente nos encontramos en el auge de las adaptaciones de superhéroes al cine.
El Universo Cinematográfico de Marvel ya es la franquicia más rentable en la historia del cine, con 16 películas estrenadas desde 2008 y con muchas más por llegar durante los próximos años. Seguramente Disney (actual propietaria de Marvel) no debe tener ningún inconveniente en seguir explotando su franquicia más lucrativa, pues aunque no todas las películas llegan a estar a la altura de las expectativas, no ha tenido a la fecha ningún descalabro en taquilla.
Más aún que la crítica suele ser muy benevolente con sus producciones para cine y televisión, en especial el UCM de Netflix, todo parece indicar que aún tiene mucho que ofrecernos, pero esperen… creo que estamos olvidando algo importante, Marvel es primeramente una empresa de comics, ¿no deberíamos centrarnos en los comics antes que en las películas basadas en ellos? Suena lógico, pero Marvel está haciendo justamente eso en estos momentos, evidentemente por los beneficios económicos que Hollywood le ofrece, lo que también suena lógico.
Basta con observar en retrospectiva los últimos 8 años de la división editorial de la empresa para darnos cuenta de lo evidente: ninguna saga que realmente valga la pena ser ampliamente recordada ha visto la luz durante ese periodo de tiempo. Civil War es por mucho la última gran saga que Marvel nos ha ofrecido en impreso y de eso ya hace más de 10 años. Si tuviéramos que meter las manos al fuego por algunas historias recientes quizá sería por Secret Invasion o Avengers vs X-Men, pero serían más los cómics que dejaríamos en el fuego sin remordimiento alguno, como la mediocre Secret Wars o la extremadamente forzada Civil War II.

Mientras que la división de cine parece haber encontrado la fórmula mágica, no ha sido así con la división editorial, que según comentan las malas lenguas se encuentra convertida en un caos creativo, víctima de malas decisiones de los editores en jefe, así como a las presiones de ajustar los argumentos de las historias con el fin de encajarlas de mejor manera al concepto del Universo Cinematográfico, aunque ello conlleve el transformar radicalmente a un personaje, o incluso, desaparecerlo de la mayoría de los comics, como es el caso de los X-Men y los Cuatro Fantásticos, cuya relevancia ha sido relegada debido a que los derechos de cine de ambos grupos superheroicos pertenecen a 20th Century Fox y el seguir lanzando historias importantes de ellos sería promocionar las películas de la competencia(hablando de cine claro está).
Si bien el caso de los derechos de Spider-Man en manos de Sony termino en buenos términos para ambas partes no ha sido así con los personajes de Fox, quienes siguen en un veto silencioso, en espera de que los derechos algún día vuelvan a casa.
Sonará frívolo, pero Marvel apunta en grande a lo que realmente le está dando frutos reflejados en miles de millones de dólares en taquilla y merchandising, sabe perfectamente lo que está haciendo, aun si eso significa el limitar sus historias a los personajes de los que posee sus derechos de cine. Parece estar ganando con el público general, la pregunta es si los fans más puritanos de la editorial soportaran más mutilaciones de personajes o ridículos giros argumentales (llámese Quicksilver y Scarlet Witch como Inhumanos), mientras los fans de la competencia no dejan de alabar las nuevas historias que la compañía de Superman viene creando en los últimos tiempos (aunque en cine no le hacen ni sombra a Marvel).
Pero como dijo un gran sabio, "el mundo se consume en dinero" y mientras el cine le dé a Marvel más dinero que unos simples libritos, que importan los fans y sus berrinches, al final el cómic para Marvel sólo sirve para promocionar su maravilloso y soberbio Universo Cinematográfico, y quien opine lo contrario, que cree su propia editorial.
¡Atención!
Si eres fan del UCM (o MCU en inglés), no olvides que este 2 de noviembre se estrenara la tercera parte de la saga del dios del trueno Thor: Ragnarok, la cual además del protagonista principal incluirá a Hulk y a Doctor Strange haciendo mancuerna con el asgardiano para evitar que la diosa de la muerte Hela destruya su mundo.
El largometraje estará muy libremente basado en la saga Ragnarok del mismo Thor, con elementos de Planet Hulk, por lo que no se espera una adaptación muy fiel con respecto al material original, aunque los trailers lucen espectaculares.